Observando desde lejos...

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jueves, 22 de octubre de 2009

SOMBRERO, SOMBRERITUS...! LA HISTORIA


Gracias a la pintura rupestre, se pudieron conocer los primeros modelos de esta prenda de vestir. En el período Paleolítico, los sombreros no fueron creados sólo con la intención de protegerse del mal tiempo, sino como forma de separar los pensamientos de Dios. Sin embargo, no es sino hasta la Edad Media que este accesorio toma mayor preponderancia y significado en el vestuario de los hombres.


Desde la época feudal incluso hasta comienzos del siglo XX, el uso de los sombreros podía reflejar la pertenencia a una determinada clase socio-económica o también podían dejar visible el cargo y poder que tuviera una persona en un quehacer. De allí, que la acción de reverencia de "quitarse el sombrero" ante de los reyes o presidentes tuviera tanto significado, demostrando de esa manera el respeto o cortesía ante la investidura.


En los siglos V y VI, el gorro frigio fue el accesorio más famoso de la época, junto con el cetro, la espada y la corona. Debido a esto, el gorro frigio también fue utilizado durante la Revolución Francesa.

Durante el Renacimiento, el gorro frigio se flexibilizó dando origen a la boina Tudor. Por otro lado, los humanistas, estudiosos, artistas y adolescentes utilizaban un sombrero conocido como Birrete, una gorra pequeña en forma cónica generalmente roja. El color rojo no era coincidencial, éste era considerado como símbolo de poder y de la vida.


En el siglo XVIII se extendió en las clases populares el uso de sombrero de ala, el cual fue evolucionando con el pasar de los años. Esta prenda de vestir se usó con alas laterales, con las alas dobladas, con plumas, etc. De hecho, este tipo de sombrero ha sobrevivido hasta nuestros días siendo el accesorio que actualmente utiliza la Guardia Civil Española.



Del otro lado del continente, también se utilizó un sombrero de ala parecido al español, conocido como Jarano, este es el típico sombrero de charro, con alas anchas y copa alta. También por esa época, en Argentina apareció el sombrero de gaucho, realizado con fieltro y ajustado en modelo al clima de las distintas épocas del año.


Con el pasar del tiempo, los modelos y estilos de los sombreros fueron evolucionando, adaptándose a los cambios y a los eventos de la sociedad. A principios del siglo XIX fueron famosos los atavíos con pieles de animales tales como ardillas, castores o cualquier otro roedor.


Ya finalizando este siglo, las pieles pasaron de moda y le dieron paso al sombrero de hongo o bombín de fieltro, el cual fue inmortalizado por el actor y director Charles Chaplin. Este sombrero era utilizando solamente en la ciudad; para los días de campo o de pinic, eran preferidos los sombreros de paja con el ala pequeña y dura y la copa casi al ras de la cabeza, conocidos como Canotier.
APL

1 comentario:

Yoni Bigud dijo...

Me gustan estos artículos que revelan tanto de un objeto. No sabía nada de esto.

Muy bueno.

Un saludo.